Richard Norris de Virginia recibió un trasplante de cara hace tres años, transformó su vida. Ahora la hermana del hombre cuya muerte hizo posible que se encontrará cara a cara con Norris por primera vez.
En un emotivo encuentro filmado para “60 Minutes Australia,” Rebeca Aversano pide Norris si le importaría si ella le su nueva cara. “No, en absoluto”, responde, de acuerdo con un remolque para el programa, que se emitirá el domingo.
La cirugía pionera que permite Norris una consideración diferente de la vida, ahora con 37 años, una tuvo lugar en marzo de 2012.
Él había estado involucrado en un accidente de arma de fuego en 1997 que se quitó gran parte de las mandíbulas superior e inferior, además de los labios y la nariz, y necesitaba un tubo de la tráquea para respirar.
Un equipo de especialistas de la Universidad de Maryland Medical Center realiza el procedimiento, que duró 36 horas. La cirugía implicó la sustitución de ambos maxilares, así como la lengua y la piel y el tejido nervioso y muscular subyacente, y todo un conjunto de dientes. En esencia, todo su rostro fue reemplazado a excepción de sus ojos y el remanente de atrás de su garganta.
Los médicos dijeron que la cirugía Norris era el más extensa de su tipo.